jueves, 11 de febrero de 2010

La ciencia y la tecnología moderna frente a las prácticas endógenas



reo que hay que buscar las raíces de la hostilidad y la incomodidad que mucha gente tiene con respecto a la ciencia y la tecnología (CyT).

Probablemente las encontraremos en la degradación de la educación secundaria de las últimas décadas, y en indudables abusos de parte de entidades comerciales y estatales que promueven y distribuyen productos complejos, como por ejemplo ciertas prácticas de las grandes compañías farmacéuticas. Estos y otros factores han conducido a una población muy mal informada, casi delusional, y dirigentes políticos que actúan desde cómodas posiciones ideológicas que les “explican” lo que no entienden.

Hay gente que añora soluciones simples que pueden comprender, o aún soluciones cuasi-místicas como la fe que muchas personas tienen en la “medicina natural”, como si los ingredientes curativos de las plantas no fueron componentes con propiedades químicas dadas.

La tecnología endógena tiene innegables méritos y la CyT “modernas” pueden aprender mucho de ella. De hecho, y como ejemplo, medicinas como la cloroquina para combatir la malaria proviene de una antigua receta para la quinina en base a la corteza de un árbol; pero en este ejemplo también podemos percibir el peligro de mitificar y rever acríticamente a lo arcaico: la cloroquina puede producir daños permanentes en la retina del usuario y éste tiene que hacer un seguimiento regular de sus ojos con un sofisticado equipo oftalmológico para evitar quedarse ciego.

Sin embargo en el Oriente de Venezuela los campesinos siguen preparando un te casero de este recurso sin ningún control. A veces añaden a este brebaje pastillas de aralen basadas en el mismo producto, así aumentan los efectos de lo que ya es una dosis no medida y fuera de supervisión médica.


Fuente de la imagen de
Cinchona pubescens, recurso endógeno
para conseguir quinina
.





Y podemos seguir añadiendo a la complejidad del problema de la quinina: el árbol provino originalmente de Perú y en tiempos coloniales llegó al Caribe por contrabando. Ahora en su país de origen la sobre-explotación comercial amenaza con su extinción. En la página web "Servindi" leemos:

"Científicos peruanos llaman a una cruzada para salvar el árbol de la quina, cuya imagen representa la riqueza vegetal en el Escudo de Perú, porque está en peligro de extinguirse tras años de sobreexplotación por poseer un alcaloide que ayuda a combatir la malaria."

En este ejemplo tenemos ilustrados algunos de los efectos del oscurantismo anti-científico: el uso no informado de compuestos químicos, la fe irracional que se tiene con relación a los productos "naturales" y ancestrales y el uso insostenible de los recursos de la biomasa de la tierra.

Cuando la ignorancia llegue al poder, peligramos todos. Es necesario una masiva campaña educativa sobre el significado de la CyT. Ellas se basan epistemológicamente en un proceso de constante auto-crítica y constituyen una de las actividades humanas que más se corrigen y revisan. Dogmas científicas duran sólo el tiempo necesario para su revisión y modificación a la luz de nuevos conocimientos.

Reconozco que la CyT han sufrido de sus propios y graves problemas éticos y filosóficos (la ciencia al servicio de la guerra, por ejemplo), y he reflexionado sobre algunos de estos dilemas en otra entrega de este mismo blog. Estas dudas también constituyen parte de de la autocrítica de la CyT.

Por esta capacidad de reflexión y autocrítica la CyT se erigen en grandes opositores de la ideología.

Fuente de otra imagen del ábrol chinchona
 
Locations of visitors to this page