Fuente de la foto del piano de Joseph Beuyes
He hablado en otras ocasiones de la importancia del espacio público. No se puede subestimar el efecto de haberlo abandonado en Venezuela, en particular en Caracas donde ya casi no existen espacios colectivos que se respetan y se cuidan. Por esta razón quiero volver mi atención al arista alemán Joseph Beuys que creía en los poderes transformativos del arte, y adoptó en su vida la postura de chamán como una figura que cura y señala, como una expresión del llamado “arte social”. Uno de sus obras puede verse en el piano con pies de elefante que se ve a la izquierda de este texto.
Fuente de la foto de algunos de los 7000 ábroles
Fuente de la foto de algunos de los 7000 ábroles
Pero tal vez su obra más conmovedora fue sus “7000 robles”. Consistió en sembrar los árboles, cada uno al lado de una piedra granito. Lo inició cuando le quedaban sólo cuatro años de vida pero la comunidad de la ciudad de Kassel en Alemania asumió la tarea aun después de su muerte. Al fin, todos fueron ubicados y quedaron como un tributo a Beuyes, pero también al espíritu de un pueblo. Las piedras simbolizan peso, continuidad y la obra del hombre. Los árboles significan cambio, transformación y vida natural.