Es importante analizar la situación de las dictaduras de manera metodológico y en base a este análisis elaborar estrategias que conducirán eventualmente a la creación de democracias. En el mundo hay muchos ejemplos de gobiernos totalitarios que han sido reemplazados de manera no-violenta por sistemas más justas, y se puede señalar los acontecimientos recientes en Zimbabue y África del Sur como iniciativas que apuntan en esta dirección.
Un guía para este tipo de análisis puede encontrarse en el libro de Gene Sharp (2002/2011 -la referencia completa está al final-) y a continuación cito su obra de manera extensiva.
En Venezuela hay muchas personas que escriben en los medios electrónicos sus anhelos de ser “salvados” por una invasión extranjera. De hecho, el mismo gobierno aumenta este deseo, con dos propósitos: a) si los Opositores quedan tranquilamente esperando ser rescatados, no van a actuar por cuenta propia, y b) este tipo de invasión energiza su propia base ya que confirma sus miedos respecto a una amenaza “imperialista” inminente. Por otro lado muchos opositores ven una solución en el escape a otros lugares donde pueden obtener un mejor nivel de vida, y es cierto que los niveles de desabastecimiento en el país ya constituyen una amenaza humanitaria.
Dice Sharp que “Muchas personas que actualmente están padeciendo bajo una dictadura, o que han tenido que exilarse para escapar de sus garras, no creen que los oprimidos puedan liberarse por sí mismos. Ellos no esperan que su pueblo pueda ser liberado sino por la acción de otros. Ponen su confianza en las fuerzas extranjeras. Creen que sólo una ayuda internacional puede ser lo bastante fuerte como para derribar a los dictadores. Esa visión de que los oprimidos son incapaces de actuar eficazmente es algunas veces correcta por tiempo limitado. .... Las fuerzas externas pueden ser: la “opinión pública”, las Naciones Unidas, un país en particular o sanciones internacionales económicas y políticas. Una situación así puede parecer consoladora, pero existen graves problemas en cuanto a la confianza depositada en un salvador foráneo. Esa confianza puede estar puesta en un factor totalmente errado. Por lo general, no van a llegar salvadores extranjeros. Si interviene otro estado, probablemente no deba confiarse en él....." (Sharp, p. 7).
Por otro lado la Oposición puede estar desorganizada y carecer de un plan viable de movilización y cambio. Convertir el desasosiego y descontento en acción política requiere que los líderes tengan una visión sobre un plan maestro de gesta y estrategias dables. El primer paso es crear una Oposición que puede enfrentar de verdad a la dictadura. Dice Sharp:
"Cuando se quiere echar abajo una dictadura con la mayor efectividad y al menor costo, hay que emprender estas cuatro tareas:
• Se debe fortalecer a la población oprimida en su determinación de luchar, en la confianza en sí misma y en sus aptitudes para resistir;
• Se debe fortalecer a los grupos sociales e instituciones independientes del pueblo oprimido;
• Se debe crear una poderosa fuerza de resistencia interna; y
• Se debe desarrollar un amplio y concienzudo plan estratégico global para la liberación, y ejecutarlo con destreza" (Sharp. p. 8).
Sharp promueve los métodos no-violentos de acción y dice que tienen más probabilidad en desembocar en una democracia. Uno de los peligros en confrontar una dictadura es que sea eventualmente reemplazada por otra dictadura, tal vez peor que la original. Dice Sharp:
“...la lucha noviolenta le da a la población armas para la resistencia, que podrán usar para defender sus libertades tanto contra los dictadores que existen como contra los que puedan existir. A continuación, mencionamos varios de los efectos democratizadores positivos que tiene la lucha noviolenta:
“• La experiencia de aplicar la lucha noviolenta puede hacer que la población confíe más en sí misma, en cuanto a desafiar las amenazas del régimen y la capacidad de éste para la represión violenta.
“• La lucha noviolenta entrega las armas de la nocooperación y el desafío, mediante las cuales la población puede resistirse a los controles no democráticos que imponga sobre ella cualquier grupo dictatorial.
“• La lucha noviolenta se puede usar para defender la práctica de las libertades democráticas, tales como la de expresión, la prensa libre, las organizaciones independientes y el derecho a reunirse enfrentándose a controles represivos.
“• La lucha noviolenta contribuye en forma importante a la supervivencia, renacimiento y fortalecimiento de los grupos e instituciones independientes de la sociedad como mencionamos antes. Estas son importantes para la democracia por el valor que tienen para movilizar la capacidad de poder de la población y de imponerle límites al poder efectivo de cualquier dictador en potencia.
“• La lucha noviolenta suministra armas mediante las cuales la población logra concentrar su poder contra la acción represiva, policiaca o militar, ejercida por un gobierno dictatorial.
“• La lucha noviolenta ofrece métodos mediante los cuales la población y las instituciones independientes pueden, en interés de la democracia, restringirle o negarle los recursos de poder a la minoría gobernante y por lo tanto, amenazar su capacidad de seguir ejerciendo la dominación.” (Sharp, p. 38)
Es esencial planificar cualquier movimiento hacia la democracia. Pero la tendencia de los luchadores políticos es reaccionar a lo que dice y hace el gobierno, sin tener un esquema propio de acción. Otro problema es que a veces los líderes de la resistencia están pensando más en su propio papel para el país después del logro de los cambios políticos; es decir, ambicionan para sí mismos la nueva presidencia u otro papel importante en cualquier nuevo régimen. Sharp dice:
"¿Por qué será que las personas que tiene la visión de traer la libertad política a su pueblo, tan raramente preparan un plan estratégico global a fin de alcanzar esa meta? Desafortunadamente, con frecuencia la mayoría de los miembros de un grupo democrático de oposición no entienden la necesidad que hay de planear o no están acostumbrados o capacitados a pensar estratégicamente. ... el patrón común es simplemente reaccionar a las iniciativas de la dictadura. Así la oposición está siempre a la defensiva, tratando de defender libertades limitadas o los bastiones de la libertad; en el mejor de los casos, demorando el avance de los controles dictatoriales, u ocasionándoles problemas a las nuevas políticas del régimen.
Algunos individuos o grupos, por supuesto, no ven que haya necesidad de una amplia planificación a largo plazo para un movimiento de liberación. ...Otros asumen que porque simplemente viven y dan testimonio de sus principios e ideales frente a las dificultades, están haciendo cuanto pueden para implementarlos. El compromiso con los objetivos humanitarios y la lealtad a los ideales son admirables pero inadecuados para acabar con una dictadura y conquistar la libertad.
“Otros opositores de la dictadura muy ingenuamente creen que si sólo llegan a emplear la violencia suficiente, la libertad llegará sola. Pero, como apuntamos antes, la violencia no garantiza el éxito.
“En vez de a la liberación, ésta puede llevar a la derrota, a la tragedia masiva o a ambas. En la mayoría de los casos la dictadura está mejor equipada para la lucha violenta, ....
“...Lo que se necesita ...es la acción basada en un cálculo minucioso de los “siguientes pasos” que hay que dar para derrocar la dictadura. Sin un análisis estratégico, los líderes de la resistencia a menudo no sabrán cuál deberá ser ese “siguiente paso”, ...." (Sharp, p. 43-44).
Algunas preguntas iniciales en el desarrollo de un plan maestro con sus estrategias son éstas:
"En particular, los estrategas tienen que dar respuesta a muchas interrogantes fundamentales como éstas:
• ¿Cuáles son los principales obstáculos para lograr la libertad?
• ¿Qué factores facilitarían el alcanzarla?
• ¿Cuáles son los puntos fuertes de la dictadura?
• ¿Cuáles son las diversas debilidades de la dictadura?
• ¿Hasta qué punto son vulnerables las fuentes de poder de la dictadura?
• ¿Cuáles son los puntos fuertes de las fuerzas democráticas y de la población en general?
• ¿Cuáles son los puntos débiles de las fuerzas democráticas y de la población en general, y cómo pueden corregirse?
• ¿Cuál es la posición de terceras personas no inmediatamente involucradas en el conflicto que están ayudando, o podrían ayudar, bien a la dictadura, bien al movimiento democrático y cómo podrían hacerlo?" (Sharp, p. 50).
Como primer paso en la elaboración de un plan coherente de acción contra una dictadura hay que analizar las fuerzas y debilidades del gobierno que se quiere reemplazar con una democracia. Propongo estas categorías preliminares, sujetas a modificación:
Fuerzas de la dictadura
1. No depende de la producción nacional sino de comercios y minerías ilegales.
2. Tiene control de la distribución de la comida.
3. Tiene el apoyo de milicias extra constitucionales y fuera del control de la ley.
4. Tiene bastante control de las fuerzas de orden tradicionales.
5. Tiene bastante independencia de la opinión pública porque sus recursos provienen de otras fuentes...
Debilidades de la dictadura
1. Confronta la desaprobación de la mayoría de los países extranjeras.
2. La mayoría de la población no quiere que se continúa en el poder.
3. La mayoría de los comentaristas en los medios electrónicos se le opone.
4. La infraestructura del país se desmorona y esto constituye un motivo de mucho descontento popular.
5. No hay producción interna.
Dejo abierto a los lectores de este ensayo caracterizar al gobierno con más claridad. El paso siguiente es, en base a este análisis, elaborar un plan maestro de acción y las estrategias apropiadas para realizarlo.
Referencia:
Gene Sharp, (2002/2011). De la Dictadura a la Democracia Un Sistema Conceptual para la Liberación. Boston, Massachusetts: The Albert Einstein Institute