English
The problem with the “socialist” model is not public
spending on universities, health care or the rest. In fact public spending is a
mirror show because the “new” universities are not all that well funded either.
Public grade schools and high schools are not fulfilling their initial
promises. Hospitals and public health in general are understaffed, underfunded,
and lack necessary supplies like medicines and reagents for blood exams. Crime
control is non-existent. In fact there is some evidence that weapons that prisoners
in the penitentiary system obtain while in jail are helping to supply gangs on
the outside. And non-governmental sources of production and income have been
gradually eliminated, to the point where almost everything has to be imported.
The source of all this apparent failure is a problem
of power. There is no real effort to rectify these malfunctions; rather, the
aim seems to be to make everyone dependent on the government for their
survival. Under this system protest becomes too costly, and people just acquiesce:
they comply and seem to go along with the demands made on them.
Español
El
problema con el modelo “socialista” no tiene que ver con los gastos públicos en
renglones como universidades, salud o el resto. De hecho, el gasto público parece
un juego de prestidigitación, porque las “nuevas” universidades tampoco gozan
de enormes presupuestos. Es más: las escuelas primarias y liceos no están
cumpliendo sus promesas iniciales y hospitales –y otros servicios públicos de
salud- carecen de personal e insumos, inclusivo reactivos para exámenes de
sangre. El control del crimen no existe: efectivamente es posible que las armas
que los presos en las cárceles obtienen ayudan a suplir las necesidades de los
hampones en la calle fuera de dichas instituciones. Y se han ido eliminando gradualmente
a las fuentes no-gubernamentales de producción e ingresos económicos, al punto
donde todo tiene que ser importado.
La
fuente de todo este fracaso aparente se presenta como un problema de poder. No
hay esfuerzos verdaderos para rectificar estas dificultades; más bien da la
impresión que el propósito del “modelo” es crear dependencia en el gobierno de
manera que todo el mundo esté sujeto a su voluntad para poder sobrevivir. De
este modo la protesta se vuelve demasiado costosa: las personas acatan las
órdenes que reciben y en fin, llegan a estar de acuerdo con las situaciones así
impuestas.