miércoles, 29 de abril de 2015

Democracy and civic action / Democracia y la acción cívica


These are some reflections in English and Spanish about democracy and how the clergy in Baltimore were able to calm the racial violence there.

Estas son algunas reflexiones en inglés y en español sobre la democracia y cómo miembros del clero en Baltimore fueron capaces de restorar algo de orden en aquella ciudad.

English:

For some time now I have been thinking that democracy needs to be re-thought. It shouldn't be necessary for people to confront the police, at great danger to themselves, in order to make ethical and civic statements. There should be more mechanisms for influence from below, in addition to the voting process.  Some strategies for making these confrontations fruitful do exist, one of which is the universally respected figure that brings concord. It is rarely possible to use it, but in this case the clergy in Baltimore were able to bring protesters and police together for the purpose of restoring some degree of peace. However, racial bias in maintaining order, which is the main issue, is still unsolved.

Español:

Desde algún tiempo he reflexionado sobre la necesidad de re-pensar la democracia. La confrontación peligrosa entre la policía y la gente no debe  ser obligatoria para expresarse ética y cívicamente. Debe haber mecanismos estructurales para la influencia “desde abajo”, más allá del voto. Una estrategia es el uso de la figura que se respeta universalmente, pero es raro encontrarlo; en este caso en Baltimore miembros del clero lograron juntar a los manifestantes y la policía para restaurar algún grado de paz. Sin embargo, el sesgo racial en la ciudad –y en otros lugares de los Estados Unidos, es el punto central, y queda sin resolverse.


Referencia

Rebecca Eisenberg (28/04/15). This powerful footage of over 100 clergy arm-in-arm through Baltimore shows the power of community.Upworthy. Disponible en: http://www.upworthy.com/this-powerful-footage-of-over-100-clergy-arm-in-arm-through-baltimore-shows-the-power-of-community?c=ufb1

martes, 28 de abril de 2015

El hombre que paró el desierto



Curiosamente no he encontrado una descripción en español de las técnicas usadas por "hombre que paró el desierto" Yacouba Sawadogo. En una zona de plena desertificación, alineó largas hileras de piedras para hacer más lento el drenaje del agua y para disminuir el efecto del los vientos. También cavó huecos y los llenó de estiércol y otros materiales nutritivos. Con el tiempo comenzó a crecer una cubertura vegetal, incluyendo árboles. Él ayudó este proceso sembrando otros árboles.

Es una técnica tan sencilla. Imagínense que fuera usada para recuperar las zonas al sur de Caracas que poco a poco se están quedando sin vegetación.

Se sabe, además, que la falta de árboles influye de varias maneras en el cambio climático: a) sin árboles llueve menos; pareciera que fuera a revés, que la lluvia haría crecer a los bosques, pero es un sistema intricado de interdependencia, b) los árboles "secuestran" CO2, uno de los gases invernaderos.

¿No tenemos en Venezuela un ONG que se ocupa de estas cosas? Yo participaría.

Referencia:
http://fr.wikipedia.org/wiki/Yacouba_Sawadogo

sábado, 25 de abril de 2015

La Primera Guerra Mundial y Gallipolli


Anoche al llegar a casa vi en la CNNi y en la BBC largas cuberturas de la conmemoración de una batalla en la Primera Guerra Mundial en que  jóvenes soldados de Australia intentaron tomar la península turca de Gallipolli. Los reportajes hacían tristes alusiones a las muertes, las pérdidas y el heroísmo de los australianos. Nadie tuvo ni el coraje ni la duda vital para preguntar la razón de tanta miseria. 

Pregunto: ¿Qué hacían unos muchachos australianos en Turquía en 1915? La tragedia es que algún coronel (¿inglés? ¿australiano?) los mandó a morir allí. En realidad la desdicha de la Primera Guerra es que fue una confrontación entre las casas reales de Europa. Toda la gente que peleó allí pensaba que defendía -¿qué?- ¿la patria? ¿Contra quienes?

Al final, pocas guerras tienen razones reales para que la humanidad mande su gente a sacrificarse. Tal vez los aliados en la Segunda Guerra tenían un enemigo real, pero esta es otra historia.

martes, 21 de abril de 2015

Comparación de Pérez Jiménez, Rómulo Betancourt y Raúl Leoni

Ha habido en el Internet cierta nostalgia perezjimenista en Venezuela. Marcos Pérez Jiménez fue un dictador en el país desde 1952 a 1958. Fue seguido por dos gobiernos elegidos democráticamente liderizados  por Rómulo Betancourt y Raúl Leoni.

Como me preocupa mucho el creciente añoranza para una figura autoritaria que pudiera rescatar al país del caos en que se encuentra actualmente, me puse a investigar* en varias fuentes del Internet sobre las obras de Pérez Jiménez y las de los dos primeros presidentes de la democracia (Rómulo Betancourt y Raúl Leoni). Mis pesquisas han sido rápidas y por esta razón podría falta alguno de sus logros respectivos. Pero es interesante comparar los legados de los tres, sobre todo por la cualidad humanística que demuestran, versus un estilo grandilocuente.

Lo que se puede concluir es que el mito de Pérez como constructor de un país es justamente esto: un mito. Fue superado en grande por Betancourt y Leoni.

Obras de Pérez Jiménez:
1. Teleférico de Caracas,
2. Centro Simón Bolívar, hasta la Ciudad Universitaria,
3. Obelisco de Barquisimeto,
4. El Hotel del Lago
5. La Ciudad vacacional Los Caracas en el Litoral,,
6. El Helicoide
7. Sedes de clubes y oficinas militares,
8. "Los Próceres"
9. Torres gemelas del "Centro Simón Bolívar" de Caracas
10. Urbanización 23 de Enero
11. Autopista Caracas – La Guaira

Obras de Rómulo Betancourt
1. La reforma agraria
2. Bajo la dirección de Arnoldo Gabaldón, ministro de Sanidad y Asistencia Social,  el saneamiento ambiental. Venezuela se convirtió en el primer país que organizó una campaña a escala nacional contra la malaria, lo cual le permitió ser también el primero en alcanzar la erradicación de esa enfermedad en el área de mayor extensión de la zona tropical.
3. Establecimiento de la OPEP
4. Aplicación del modelo de la CEPAL referente a la sustitución de importaciones
5. Restitución de los derechos laborales de los trabajadores y empleados venezolanos
6. Construcción de más de 3.000 escuelas y 200 liceos. La matrícula escolar pasó de 847 mil alumnos en 1958, a 1.6 millones en 1963.
7. Terminación de la construcción del Puente General Rafael Urdaneta sobre el Lago de Maracaibo
8. Inauguración del Distribuidor El Pulpo en la ciudad de Caracas
9. Comienzo de la construcción de la Represa del Guri
10. El primer puente colgante sobre el río Orinoco, el Puente de Angostura.
11. Se terminó la construcción del Parque del Este en Caracas en el año 1961.
12. Creación de del IVIC sobre la base del IVNIC, con carácter de Instituto autónomo.

Obras de Raúl Leoni
1. Fortalecimiento de la industria siderúrgica y agroindustrial,
2. El desarrollo de las industrias básicas de Guayana, entre ellas, la industria hidroeléctrica y siderúrgica (la primera etapa de la Represa del Guri y la ampliación de las centrales térmicas de La Cabrera, Las Morochas, La Fría y Punto Fijo.
3. También se inauguraron sistemas de transmisión, interconectado y unidades diesel en todo el país.
4. Se creó la empresa estatal CVG Siderúrgica del Orinoco C.A. (SIDOR).
5. Se puso en producción la primera planta de aluminio de Guayana, Alcasa.
6. Se amplió la planta petroquímica de Morón
7. Se inicia la construcción de la planta petroquímica de El Tablazo.
8. Se construyeron 2.569 km de vías, se reconstruyeron 1.424 km, se pavimentaron 3.298 km, se repavimentaron 3.032 km y se mejoraron 1.959 km. La red nacional vial pasó de 28.198 km de longitud en 1963 a 37.511 km en 1968. (Esto incluye: las autopista estatal Valencia-Puerto Cabello y la interestatal Coche-Tejerías. Las autopistas urbanas: avenida Libertador, Maracaibo-San Francisco, El Valle-Coche, Barcelona-Puerto La Cruz-Guanta, el Distribuidor La Araña y su ramal hasta Coche. Las carreteras: Ciudad Bolívar-Ciudad Piar y Barinas-La Pedrera y los ramales viales: San Fernando de Apure-Achaguas, Upata-El Manteco, El Clavo-El Guapo y Guanta-Cumaná-Altos de Santa Fe. Entre otras varias autopistas, carreteras y vías urbanas
9. El Puente Internacional José Antonio Páez.
10. Se construyeron 929 edificios con 6.512 aulas para alojar 293 mil alumnos de primaria y media y en los comedores escolares se atendió un promedio de 241 mil niños diarios. La matrícula escolar pasó de 1.6 millones de alumnos en 1963 a 2.082.900 en 1968.
11. Se construyeron 153.478 viviendas.
12. Se construyeron 1.183 sistemas de abastecimiento de agua para localidades de menos de 5.000 habitantes con capacidad para servir a 1.4 millones; hubo en este periodo 2.19 millones de habitantes servidos por el sistema de acueductos rurales. Se construyeron 67 sistemas de aguas de cloaca para beneficio de 62,579 habitantes en poblaciones de menos de 5.000 habitantes. Se construyeron o terminaron obras de acueductos urbanos en casi todas las ciudades del país.
13. Se construyeron y/o equiparon los siguientes centros asistenciales: Maturín, Acarigua-Araure, Cabimas, Puerto Cabello, San Felipe, El Tigre, Cantaura-Anaco, Cumaná, Carúpano y se ampliaron los siguientes: Hospital Universitario de Maracaibo, Barcelona, Maracay, Valencia, San Cristóbal, Valera, Ciudad Bolívar, Villa de Cura, Río Caribe, Cumanacoa, Tovar, Colón, Upata, Caicara del Orinoco, Quibor, Tucupita, El Vigía y Caja Vieja.
14. Se logró disminuir la tasa de mortalidad infantil hasta 41,6 en 1968, cuando en 1958 esa tasa era de 64,4.
16. Se inició la construcción del Metro de Caracas.

*No cito mis fuentes ya que mis investigaciones no eran sistemáticas. Podría haber repetido la redacción de algunas de ellas.

viernes, 17 de abril de 2015

El hambre y Mercal



Ayer hice mi segunda cola. Fui reclutada por un grupo de vecinas porque tengo carro y me prometieron que el Mercal de nuestro caserío vende café.

Conozco mi vecindario, pero a veces, como ayer, me maravilla: el Mercal queda al final de nuestra camino principal (que es una calle ciega), donde sale otra vía vecinal en que acaso cabe un carro pero que habitualmente acomoda precariamente el paso de dos camiones a la vez, algo así como la ruta de seda tibetana con un abismo lodoso por un lado y una subida empiñada por el otro.

Antes de salir había vaciado la maleta del carro e íbamos con todos los asientos ocupados. Llegamos a las 5:30 a.m. y no éramos los primeros, pero como he vivido aquí por más de treinta años, conozco a muchos. Ya estaban la Sra. Carlota, el Sr. Ramón y su hija, y otros que saludo y sé de sus variadas historias, pero no recuerdo sus nombres. Hacía mucho frío y regresé al carro para una bufanda que dejo allí para emergencias.

Mientras esperábamos tomábamos turnos sentándonos en un ladrillo ancho, y cada uno después de su momento sentado, me lo ofrecía a mí o a la Sra. Carlota que somos las más añosas. Chismeamos y tengo que decir que no me sentí frustrada sino inclusive estaba gratamente entretenida. Era un encuentro vecinal nada desagradable, y no pudimos quejarnos de la política porque algunos somos de la Oposición y otros son Chavistas. Hablamos de los hijos, de la escuelita local, de los miembros de las familias extendidas,  de enfermedades, de medicinas naturales, de curaciones y de algunos fallecimientos. Es decir, hablamos de la vida.

La cola iba creciendo detrás de nosotros y claramente no iba a haber productos suficientes para todos. Mi di cuenta de algo importante, más allá de ideologías:

Todos son personas que viven en una situación permanente de escasez  (menos yo, pero yo también: soy profesora universitaria). Aquel Mercal funciona en la casa de una vecina –una mujer de nosotros mismos porque la conocemos desde siempre-, es una necesidad primordial. Yo buscaba nada más una bolsa de café, pero casi todos los demás requerían de todo; salían llevando pesadas bolsas a sus casas las cuales en algunos casos quedan a un par de kilómetros de distancia. Llené mi cupo de carne, pollo y otras cosas para dárselos a la mujer que vive al lado mío, para que tuviera más que su límite para alimentar a su marido y sus dos hijos. En todo caso yo no consumo carne.

Quiero decir al final: es verdad que el gobierno que tenemos nos metió -irresponsablemente- en estos problemas de carencia e inflación. Pero en las condiciones actuales, sin el Mercal, habría gente muriendo realmente de hambre.

lunes, 13 de abril de 2015

Günter Grass y "Pelando la Cebolla"



Quisiera decir algo sobre Günter Grass. Fue muy criticado por parte de algunos de sus lectores cuando en su autobiografía “Pelando de Cebolla” narró sobre su niñez y adolescencia en la Alemania nazi. Para mí estas críticas tenían una alta dosis de hipocresía, ya que todos de su generación, o eran partidarios del régimen (la vasta mayoría), o eran unos pocos opositores que arriesgaron sus vidas para derrotarlo.

Me asombra su coraje en aquellas reflexiones. Esas vivencias le marcaron a él y todos sus contemporáneos de maneras profundas. Grass y sus amigos se criaron en un mundo en que fueron empujados a adorar actos heroicos y aceptar sucesos violentos: se podría decir que para aquella generación de muchachos que se formaron en el fascismo, no hubo otro mundo: el nazismo había existido por siempre ya.

Contó sobre distintos episodios de su vida: su niñez, su tiempo como soldado en el Tercer Reich, y finalmente sus experiencias de post-guerra.  Al evocar su niñez, Grass se pregunta sobre el silencio que el régimen de Alemania de ese entonces impuso incluso sobre el niño que él era: “¿Es posible que el miedo de hacer alguna pregunta que lo pusiera todo patas arriba me volviera mudo?” (p. 17). Y luego habla de su admiración por los héroes, y de cómo él y los demás niños de su edad querían “combatir”. Cuenta cómo a los diez años se hizo miembro del  ”Jungvolk” en preparación para entrar a las Juventudes Hitlerianas donde “colaboré sin rechistar...” (p.27).

En otra descripción de su juventud dice:

Ciego a la injustica que se hacía cotidiana en el entorno próximo de la ciudad... iba creciendo y creciendo el campo de concentración Stutthof, sólo me indignaban los crímenes del poder clerical y las torturas de la inquisición”.... En retrospectiva, parece como si aquel gesticulante alumno de enseñanza media hubiera conseguido trasladar su sentido de la justicia, alimentado por los libros, a algunas zonas de repliegue medievales” (p. 39-40).

Y luego dice:

Al fin y al cabo fui de las Juventudes Hitlerianas y joven nazi. Creyente hasta el fin. No precisamente con fanatismo al principio, pero sí con mirada inconmovible, como un reflejo, en la bandera, de la que se decía que era ‘más que la muerte’, permanecí en filas, experto en llevar el paso” (p, 43).

No deseo transcribir todo el entusiasmo patriótico inicial y luego la decepción de Günter Grass, sin embargo, creo que el juego que experimentó entre silencio,  la sublimación personal y la aceptación de lo inaceptable es muy, demasiado conmovedor. Todas estas emociones suceden con el trasfondo de un régimen sociopolítico y un movimiento de masas que desborda a los individuos, aunque los incorpora como parte de la acción social.

La irracionalidad de esta doctrina es innegable tanto en sus objetivos represivos como en el culto a la muerte que manifiesta.  Los mensajes que emite un régimen de este tipo tienen un carácter instintivo: alaban el sacrificio y la ofrenda de la muerte como un deber ciudadano, y en vez de reflexión y debate entre electores, se exige el acatamiento, el activismo y la militancia. Emplea la fuerza colectiva para lograr los objetivos de un solo líder que representa la autoridad del Estado. Este líder es el que tiene la autoridad de promulgar leyes y establecer el orden social tal como él desea definirlo. Se trata de una ideología que rechaza el ideal de la libertad individual a favor de los objetivos de obediencia y lealtad absolutas. En este contexto los ciudadanos deben obrar de manera disciplinada en el espíritu castrense. A menudo el dogma proclama la superioridad genética del grupo en el poder, y el patriotismo aparece como un valor y un deber casi sacros. Se rechaza al débil al considerarlo como degenerado y se elogia la fuerza como una virtud.

Günter Grass describió su propia vivencia, pero al mismo tiempo a las de todos los demás procesos sociales y políticos que engullan sus seguidores. Creo que “Pelando la Cebolla” debe ser lectura obligada en todos los liceos del mundo.

La muerte de Grass es una enorme pérdida, una que yo personalmente lamento profundamente. ¿Qué otras cosas hubiera podido decirnos?

lunes, 6 de abril de 2015

"Escuela para el Oído: Nikolaus Harnoncourt



Acabo de escuchar la “Escuela para el Oído” en Film&Arts, un concepto que Gustavo Dudamel adaptó de una idea original de Daniel Barenboim. Quienes han escuchado a la “Escuela” antes saben que se trata de una presentación en que un director de renombre desmenuza, junto con los músicos, a una obra frente a un público: la idea es hacernos a todos entender sus complejidades y sutilezas.

Hoy oí la Nikolaus Harnoncourt frente a la Orquestra Sinfónica Simón Bolívar analizar la IV Sinfonía de Beethoven; el sentido político de esta composición es evidente dado que en un primer momento el compositor dedicó su obra a  Napoleón, y luego cuando el emperador se coronó como tal, el maestro se desilusionó con él –violentamente- y borró el homenaje.

Esta versión de la obra me conmovió mucho. Lo interesante es que da para cualquier interpretación política en Venezuela. Pero la música es así.

viernes, 3 de abril de 2015

El pecado del fanatismo, pero al revés



La autora Ayaan Hirsi Ali ha escrito un ensayo en el Wall Street Journal con argumentos para apoyar la necesidad de reforma en el Islam. Al final ofrece cinco maneras específicas en que esto debe ocurrir. Las repito aquí, pero invita a los eventuales lectores de este blog a considerar las posibilidades de aplicarlas a todas las tres religiones monoteístas.

Me parece que la autora comitió el pecado del fanatismo, pero al revés. Ella considera que un solo cuerpo de credos  requiere reforma. Por ejemplo en su primera recomendación, sugiere que el estatus semi- divino de Muhammad debe ser reconsiderado. ¿Los cristianos también deben revisar el estatus divino de Cristo?

Desde Arkansas - hasta Tel Aviv - hasta Riad-  existe el problema de la exclusividad religiosa, es decir, la creencia que “mi” dogma sea la última verdad espiritual del mundo; esto ha sido así desde el inicio de la humanidad, ilustrado en la batalla por Jericó: el sectarianismo ha sido una amenaza a la paz de la humanidad.

En este sentido más amplio publico la lista de Ayaan Hirsi Ali.

1. "El estatus semidivino de Mahoma, junto con la lectura literal del Corán. Muhammad no debe considerarse como infalible, y mucho menos como una fuente divina. Él debe ser visto como una figura histórica que unió a las tribus árabes en un contexto pre-moderno que no puede ser replicado en el siglo 21. Y aunque el Islam sostiene que el Corán es la palabra literal de Dios, en realidad es un libro que fue elaborado por manos humanas. Grandes partes del Corán simplemente reflejan los valores tribales del contexto de Arabia del siglo séptimo de la que salió. Los valores espirituales eternos del Corán deben estar separados de los accidentes culturales del lugar y el momento de su nacimiento."

[Comentario: ¿Y qué hacemos con la violencia del Viejo Testamento?]

2. "La supremacía de la vida después de la muerte. El atractivo de martirio se desvanecerá sólo cuando los musulmanes asignen un valor mayor a los beneficios de esta vida que a aquellos prometidos para el más allá."

[¿Aplicaríamos esto a todos los soldados del mundo que pelean por (su) Dios y (su) Patria?]

3. "Shariah, la gran cuerpo de legislación religiosa. Los musulmanes deben aprender a poner las leyes cambiantes dinámicas realizadas por los seres humanos por encima de aquellos aspectos de la Sharia que son violentos, intolerantes o anacrónicos."

[Creo que esto se aplicaría por igual a toda la legislación del mundo que discrimina y obliga a castigos crueles.]

4. "El derecho de los musulmanes individuales para hacer cumplir la ley islámica. No hay lugar en el mundo moderno para la policía religiosa, los vigilantes y los clérigos con habilitación política."

[Esto debe aplicarse por igual a todos los vigilantes de la fe y de las fronteras.]

5. "El imperativo de la yihad, o guerra santa. Islam debe convertirse en una verdadera religión de paz, lo que significaría rechazar la imposición de la religión por la espada."

[Ver comentario #2].


Referencia

AYAAN HIRSI ALI (20 de marzo, 2015). Why Islam needs a reformation. Wall Street Journal. Disponislbe en: http://www.wsj.com/articles/a-reformation-for-islam-1426859626

 
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